viernes, 9 de enero de 2009

Un momentum por favor

En realidad le he dado unas cuantas vueltas (tampoco muchas) al título del primer post del año. Este surge después de un comienzo de 2009 'bastante cultural'. La primera actuación fue en el Teatro Nuevo Apolo. Lleno a rebosar para presenciar los ritmos incesantes de cubetas de agua, cajones y agujas de reloj que nos presentan en su última creación Mayumaná.


A pesar de las casi dos horas de show, todo transcurre tan rápido que te da la sensación de haber estado en realidad tan sólo un 'Momentum' en el patio de butacas. Cuando uno se quiere dar cuenta, está bailando junto a los propios protagonistas en las escaleras de salida. Una armoniosa batukada que nadie se quiere perder y en la que todos participamos. Hablando de formar parte de la actuación, sólo os diré que, ahora que salen de gira, si recalan por vuestra ciudad, el mejor sitio para verles es en el patio de butacas. Y no digo más.

Después del 'exotismo' del siglo XXI, vayamos a por el 'histórico'. He de confesar que me encantan las zarzuelas. No se trata de una obsesión enfermiza, es la constatación de un hecho. Una que desconocía hasta hoy narra la historia de un rey que, más allá de querer pasar por villano (entiéndase a distinción de noble, hidalgo, monarca), descubre cómo lo que le rodea es una realidad ficticia. Su autor no es otro que Ruperto Chapí, responsable de la archi famosa zarzuela 'La Revoltosa'. El marco, incomparable. Imprescindible, el Teatro de la Zarzuela.


El decorado de la obra en particular, ese sí es cuestionable. No obstante, la obra dividida en tres actos y estrenada en 1891 es genial. Asimismo lo son los diseños de los trajes; el color y la iluminación; los más de 70 personajes entre coro y actores sobre el escenario; y una Orquesta de la Comunidad de Madrid brillante. Todos ellos conforman esta corte que he venido en adjetivar como circense, pues no faltan acróbatas y ejercicios de suelo cual Cirque du Soleil. Quizá esté exagerando, quizá haya comenzado 2009 con mucha fuerza, casi tanta como la responsable en la orquesta de ejecutar el arpa y es que se le rompió una cuerda en pleno acto.

Sí he dicho cuerda y parece que yo esta noche tengo para rato, así que de 'momentum' la dejaré reposar, no sin antes acabar como empezamos. Mencionando otro título, en esta ocasión el de la zarzuela: 'El rey que rabió'.

1 comentario:

Javier Vega dijo...

Yo no te voy a contar el espectáculo cultural que tengo montado en casa. A mi hija de 3 años los Reyes le han traido un tambor... no digo más.

Salu2